TRILOGÍA INVOLUNTARIA



Ha habido un periodo en mi escritura marcado, conscientemente, por procedimientos heterodoxos, a saber: a) la autosuficiencia de la escritura: es al mismo tiempo tema, fuente de recursos y principal destinataria de los mismos; b) el cuestionamiento de la forma: la frontera entre géneros va siendo difuminada hasta su supresión; c) el planteamiento conceptual: la obra resultante no es un conjunto o suma de piezas, sino un todo; d) hablamos de ficción: lo confieso, concibo la poesía como invención literaria, lo que enriquece a mi entender sus infinitas posibilidades. Con estos mimbres he completado, inconscientemente, esta trilogía «involuntaria», publicada gracias al cuidado y la confianza prestados por la editorial Baile del Sol. 

MEMORIA DEL CAOS (2009) es una miscelánea sobre el hecho creativo que somete al lenguaje a un minucioso proceso de descomposición y reorganización similar al de los espejos del interior de un caleidoscopio. El lenguaje como único protagonista: un ente vivo, cambiante, acaso un juego, pero un juego muy serio; y el poeta, un encantador de las palabras que tampoco logra sustraerse al encantamiento cuando nos invita a seguirle hasta la raíz misma, hasta la propia génesis del poema. 

LA DERIVA DE MARCOS SIMA (2015) es un libro de poemas y prosas estructuradas como cuaderno de bitácora que narra la peripecia de ese tal Marcos Sima del título y sus compañeros de viaje. Marcos se describe a sí mismo como «un joven poeta inestable», pero no es el único, ya que en estas páginas afloran otras voces que van formando un mosaico de la pasión, o mejor, de las pasiones humanas: el deseo, el amor, los celos, la locura, la ira, la envidia, la huida... Mosaico y coro de voces, con correspondencia de estilos marcadamente distintos que cartografían la experiencia humana (cualquier experiencia humana viene a ser global), donde el mar actúa como escenario cambiante, como espejo deformante. 

AMULETO (2019), escrito a la vez que La Deriva…, trata sobre la raíz de la vocación literaria, sobre la configuración del yo poético que armado de perplejidad, visiones, amor, memoria y, sobre todo, preguntas, comienza a expresarse. Es, en definitiva, un poema-libro sobre la formación de la personalidad poética antes que sobre la formación del poeta. Aquí no han sido tenidas en cuenta las lecturas fundamentales (fundacionales) y necesarias que dirigen toda trayectoria, sino muy sutilmente algunas canciones que funcionan como banda sonora o ambiente y trasfondo por su capacidad evocadora.